Capítulo 165

Creo que el hecho de que Lara y yo hayamos hecho las paces no se si ha sido mejor o peor. Ya no le importa tanto que Dani y yo salgamos solos pero a la vez el de las llamadas telefónicas sigue incordiando, casa vez más y ahora ayudado por la prensa.

-Dani, tendríamos que ir a... - Le grito desde la cocina, pero me corta

-Yo ya no voy a ningún sitio contigo – Me dice de malos modos

-...la compra. ¿Qué te pasa ahora?

-Patricia, será mejor que ya no volvamos a salir solos. Estoy hasta los huevos de las putas revistas. - Me dice tirándome las revistas a la cara.

-Pero bueno, tendré yo la culpa.

-En parte – No si ahora la culpable de que nos hagan fotos seré yo, como no, como siempre tengo la culpa de todo...

-¿Como que en parte?

-Una parte la tienes tú, otra yo y la otra Lara. Una por decir que le da igual que su novio salga con una amiga, la otra por salir con el novio de la primera y el otro por querer que ellas dos llegaran a ese acuerdo. Así que lo dicho, es mejor que no volvamos a salir. A ti no te afectará, pero a mí si

-¿A ti quien te ha dicho que a mi no me afecta? Te recuerdo que tengo una madre extracristiana que para ella lo primero es la religión y todo tenemos que hacerlo todo según manda la iglesia. Me está siempre molestando con el “Ten cuidado con ese en tu casa” “No me gusta que vivas con un chico” y ahora, como ve todas las revistas existentes del corazón ha visto absolutamente todas las fotos... ¿Sabes lo pesada que está? ¿Recuerdas lo que se pensaba este verano de nosotros dos? Pues así está otra vez. De eso si que estoy harta, no de unas mierdas de foto en una revista.

-Y el agobio de la prensa por la calle, la gente en el twitter...

-¿Sabes qué te digo? Déjame las llaves del coche, voy yo solita a hacer la compra, que no soy inútil – Se mete las manos en el bolsillo y me las tira. Las cojo al vuelo, compruebo que tengo la tarjeta en la cartera y salgo de casa – Adios. - Salgo de casa y me monto en el coche de Dani y me dirijo hacia el supermercado. Cuando llego al aparcamiento del super veo un coche que me suena. - ¡Miki, Annita!

-Les digo cuando bajan del coche.

-Patri, qué tal – Nos saludamos – ¿Vienes sola?

-Sí, a Dani no le apetecía venir.

-Mira el cómodo

-No, luego le va a tocar subir a él las cosas, y que no proteste.

-No, no, que no proteste – Nos reímos. Vamos los tres juntos mientras hacemos la compra con risas y el tiempo se hace más amenos que si hubiera tenido que estar sola. No ha pasado una hora y media cuando ya he vuelto a casa. Subo con una bolsa a casa. La llevo a la cocina y lo coloco. Me siento en el sofá cuando termino.

-¿Ya has subido todo?

-No. Pero no voy a subir más. Si quieres vaciar el coche de las cosas que he comprado ya puedes bajar tú, que no has hecho nada, que ya habrías podido hacer algo en casa, no se, recoger la ropa o lo que sea.

-Estaba húmeda. ¿Me vas a hacer ahora bajar?

-Pues sí.

-Pues espera que termine de leer esta página y ahora bajo

-Si cuándo lo hagas me da igual, lo que digo es que yo no voy a bajar. Voy al baño, me quito las lentillas. Vuelvo al salón, me vuelvo a sentar en el sofá, saco mi libro y me pongo a leer, mientras él sube las cosas algo adelantaré, aunque sea poco. Dani se quita sus gafas, cierra el libro y sale de casa quejándose. Cuando termina de subir la compra y voy yo a la cocina a colocarla. ¿Contenta?

-No te lo he dicho por gusto, sino par que hicieses algo, si te parece lo hago yo todo.

-Ya que te has ofrecido voluntaria...

-Yo no me he ofrecido voluntaria, he ido porque a tú no quería y hacía falta – Me voy a la cocina, pongo musica con mi móvil y me pongo a recoger la compra. - Por cierto, Dani, recuerdos de Anna y Miki, que me los he encontrado en el supermercado.

-Vale. ¿Te ayudo?

-Lleva esto al baño – Los botes del champú y demás productos del baño para que los lleve.

-Vale. - No tardo mucho en recoger todo. Miro el reloj, las 9 y media y empiezo a preparar la cena, me apetece cocinar pero no tengo mucho tiempo.

-¿Te hace pescado en salsa?

-¿De ese rico que haces tú o del otro que es verde?

-Del rico.

-Perfecto

Empiezo a hacer la cena. Me suena el teléfono cuando está la cena casi terminada. Es Anna.

-Cuqui, ha venido mi prima de Barcelona, vamos a ir a tomar algo esta noche. Me he acordado que vosotras os conocéis y se me ha ocurrido decirte si te vienes.

-Estoy terminando de hacer la cena.

-Nosotros vamos a empezar a cenar ahora, la cosa sería sobre las 11, 11 y media en el Chicote, la coctelería esa que me enseñaste la última vez que salimos de copas. Dice mi prima que quiere conocer ese sitio, que ha oído hablar muy bien de él. ¿Te apuntas entonces?

-Claro que si. Yo ceno ahora, me arreglo y me voy para allá. Chao, hasta luego

-Adios, hasta luego