Silencio
- Vamos Patri -Dice Dani asustándome
- Ves entrando - Le digo Se va y yo sigo esperando que mi interlocutor me conteste.
-
A ver como te explico yo esto sin que te preocupes innecesariamente.
Vasile a debido contarle a Vabaragio lo que pasó el otro día en el
casino, cuando os fuistéis a mi casa haciendo que era la tuya -
Bueno,casa - y ahora Vabaragio ha conseguido tu dirección y está
rondando por el barrio esperándote. Supongo que el piensa que la chica
consiguió el número por ti si Vasile le dijo algo del teléfono
porque Vasile no sabía quien eras, ¿Verdad?
- ¡Como quieres!
-
Suponía. Pues es eso, qué ahora sois vosotros los investigados. No creo
que pase nada si volvéis a Madrid, pero por mayor seguridad es mejor que
permanezcais lejos, al menos hasta Agosto, que ahí si que no vais a
tener más remedio que volver. Por cierto, ¿Te dio Margarita el Cd?
-
Sí, me lo dio, pero no lo he visto todavía. Por cierto ¿Por qué solo me
llama a mí? También tiene el número de teléfono de Dani.
- Cuando
veas el contenido del CD te va a gustar, estoy seguro. No llamo a
Martínez porque no me fío, movidas mías, ya te explicaré en otro
momento, en otra historia. Bueno, te dejo, que creo que te están
esperando. Adios.
Cuelga. Me cuesta empezar a moverme. ¿Por qué dirá
que no se fía a llamar a Dani? Bueno, ya me lo explicará en otro
momento, he decidio que ya no me voy a rayar por más cosas, aunque le
curiosidad me corroe. Entro otra vez a la piscina, el chico de la
entrada me da el ticket, por cierto, un chico encantador. Se llama
Arturo, como su abuelo fallecido el mismo día que nació él, ya tiene que
tener mala uva el destino, y es cuatro años más pequeño que yo, le
conozco bastante bien, su hermano es amigo mío, íbamos juntos del
instituto aunque ya hace años que no nos vemos, creo que él está en
Francia, en Poitiers, creo que es, de profesor de francés, por lo que sé
estuvo estudiando filología hispánica, ¡anda, lo que empezó Dani! y
francés en la escuela de idiomas y me contaron que se fue de vacaciones
Francia y allí se quedó. ¡Qué recuerdos del instituto! En otro momento
os hablaré más de él, ahora os voy a hablar de su heemano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario