martes, 6 de diciembre de 2011

Capítulo 107


Venga Dani, por favor, coge el teléfono. Media hora llamando a Dani y ni puto caso. Le vuelvo a llamar...Ah! ¡Qué me ha colgado! Ya verás, ahora si que le pienso turrar. Me va a mandar a la mierda, lo se. Si me ha colgado es porque no está en condiciones de hablar y no se si me entendéis o lo tengo que explicar; supongo que me entendéis. Vuelvo a llamar
-Joder, pesada, ¿qué quieres? Cortas el rollo, ¿sabes? - Pues si que está enfadado, sigue mascullando pero no le presto atención.
-Anna está en el hospital – Le corto.
-¿Qué? - Oigo a Lara hablando – Calla Lara, ¿qué ha ocurrido?
-Ha tenido un accidente. Ven y te lo explico mejor, hay mucha gente por aquí como para explicarte todo.
-Dame lo que tarde en vestirme e ir desde casa de Lara. - Cuelga. Flipante, prefiere a sus amigos antes que sexo con su novia... este chico ha cambiado mucho.
Rivera está de un lado a otro de la sala, Miki sentado en una de las sillas llorando. Raúl acaba de bajar a que le de un poco el aire. Me acerco a Miki y le acaricio la espalda.
-No te preocupes, ya verás como está bien, como se va a recuperar. Si no es hoy, es mañana. Ya verás en tres días estáis los dos y medio en casa felices.
-¿Y si no? El médico no ha salido todavía, cuando no ha salido es que algo va mal.
-No seas pesimista, si algo estuviera mal ya nos lo habrían dicho. Es lo primero que dicen, cuando tienen que hacer alguna intervención – Oigo a alguien corriendo por el pasillo. Alzo la vista, es Dani.
-Miki, tío. He venido en cuanto me he enterado. Ya sabes que lo que esté en mi mano...
-No vas a hacer que Anna se recupere por arte de magia, así que no creo que puedas hacer nada, así que ya puedes largarte. No pintas absolutamente nada aquí
-Miquel, no la tomes con él, que no tiene la culpa
-¿Qué no tiene culpa?¿Qué éste no tiene la culpa, dices? Pues por él vinimos a la cena, porque nos convenció para ir a casa del amigo ese vuestro estamos ahora mismo aquí, por su existencia Anna está ahí dentro y averigua tú si saldrá de ahí. - Miki se levanta y le da un empujón a Dani – Por tu culpa. P.por t.tu c.culpa... - Cae de rodillas al suelo y empieza a llorar como nunca he visto yo a una persona llorar. Dani aprieta los labios y se va corriendo. Yo voy corriendo detrás de él, bueno corriendo, llevo los tacones así que mucho correr no es que sea.
Después de largo rato buscándole por todos los pasillos posibles me da por salir a la calle y buscarle allí. Por fin le encuentro en un callejón cerca del hospital, sentado en el suelo en un rincón seco con las manos tapándose la cara. Me acerco a él y cuando me oye levanta la mirada. Está destrozado, le tiene mucho cariño a Anna y las palabras de Miki le han debido de afectar mucho, si me han afectado hasta a mi...
-Tiene razón. Es mi culpa – Me agacho para estar a su altura – Si es que no me merezco ni que estés tú aquí ahora mirándome.
-Eso no lo digas ni de broma. Lo primero, tú no eres culpable de nada, los únicos culpables son los dos tíos que les atacaron. Miki dice eso porque es él el que se siente culpable de verdad. No pudo hacer nada para evitarlo. Y lo segundo, tú no te mereces que yo esté aquí, no, es que tú, directamente, no te mereces estar aquí, así, como estás, hecho una mierda por culpa de las putas palabras de Miquel.
-Gracias por intentar animarme pero necesito estar solo.
-Antes me muero yo a que tú te quedas aquí en tu estado. Por como que yo me llamo Patricia voy a hacer que te levantes de aquí. - Niega con la cabeza y vuelve a esconder la cara entre sus manos medio moradas por el frío – Con esas estamos. Toma al menos ponte los guantes. - Me quito los guantes y se los doy. Vuelvo a entrar en el hospital en busca de Rivera. Cuando llego me doy cuenta que ha habido cambio de gente. Miki no está y me encuentro a Raúl hablando con... ¿ésta que hace aquí? Consigo visualizar a Rivera, está en el pasillo contiguo hablando por teléfono
-No me esperes... si tengo la llave...Tú duérmete ya...Buenas noches. - Cuelga – Patricia, no te había oído llegar.
-Hay que hablar. Vamos – Antes de irme paso por la sala de espera – Cualquier cosa me llamáis. Lara, Dani ya se fue. - Ponemos rumbo al callejón donde está Dani. Si yo sola no puedo levantarle con ayuda sí – Rivera, ¿donde estaba Miki?
-Se lo han tenido que llevar para darle unos tranquilizantes. Ya ha salido el médico.
-¿Y? - ¿Qué habrá pasado? - ¿Anna estará bien, verdad? - Silencio. - Arturo, por favor, contesta ¿No le habrá pasado nada a Annita, no?
-Anna está relativamente bien, pero...
-¿El bebé?
-El bebé – Una especie de llamarada de fuego me recorre todo el cuerpo. No he estado tan furiosa en mi vida
-Iban a eso. Me jugaría el cuello a que han sido los italianos y eso es lo que querían. Querían demostrar que nos tienen vigilados y cogidos por los huevos y esta ha sido la mejor forma que han tenido de hacerlo. Llevan tiempo con las amenazas: el corte de suministro eléctrico durante el programa, mi expediente del que todavía estoy esperando a saber el porqué y ahora esto. Esto ya es algo personal, Rivera, esto ya no es un favor que me pediste para tener un apoyo exterior en la investigación. Esto no es ya una simple investigación. Me da igual lo que me pueda pasar, si hace falta le doy la espalda a la justicia, lo voy a hacer. Voy a coger a esos hijos de puta, por mis ovarios que los voy a coger. Empecé en esto porque la curiosidad me comía y voy a acabar con esto porque lo que me come ahora es el rencor y la sed de venganza y justicia, esa justicia que nos está dando la espalda ahora mismo, ¿sabes que los médicos no se creen que la caída fue provocada? Dicen que al estar el suelo resbaladizo se cayó sola. Nadie nos cree, Rivera. Absolutamente nadie. Esos desgraciados están destrozando vidas. Familias. Miki lo dejó todo para venirse a Madrid y cuidar de Anna y del niño y por culpa de unas personas que solo quieren hacer daño se ha quedado sin trabajo, sin niño y casi se queda sin Anna. Daniel está destrozado llorando en un maldito callejón en el cual no se si seguirá sintiéndose culpable por las palabras de Miki y yo aquí, que sé que puedo poner cartas en el asunto lamentándome por no haber dejado a Raúl avisar a Anna a voces de lo de los dos tíos esos. Ya se acabó. Me he hartado. Ya no soporto más esta situación. Vabaragio no llega a 2012 sin haber tenido un cara a cara en serio conmigo. Te juro, Arturo, te juro por lo más sagrado que tengo, que voy a hacer todo lo que esté en mi mano para salirme con la mía. Esta historia va a cambiar, te lo aseguro


FIN

2 comentarios:

  1. :O MADRE MIA... Tienes toda la razón... muerta estoy... enterrada bajo tierra... LA LECHE! q angustia! que capitulazoos! O.O EN serio... los mejores de tooooooda la historia! te has quedado soliiiiiiiiisima!
    NEXT TEMP YA! ;)

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  2. De los nervios estaba yo mientras escribía. Cuando lo terminé casi lloro y to jajajajaj

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