sábado, 7 de abril de 2012

Capítulo 180


Me visto rápido y me voy al salón.
-Que pocas ganas tengo de hacer hoy la comida.
-¿Quieres que la haga yo?
-¿Os vale una sopa de arroz? - Afirman y mi madre se va. Oigo la puerta abrirse pero el perro no ladra, ese es mi padre. Salgo a la entrada. Me da un abrazo en cuanto me ve y se me queda mirando
-¿Todavía no estáis preparados?
-Para qué, papá.
-Nos vamos a comer. ¿No os lo ha dicho tu madre? - Negamos. Mi madre aparece por la puerta del salón.
-Yo no voy a ir a ningún sitio.
-Pues tú no vengas si no te da la gana, es el cumpleaños de la chiquilla y quiero que hagamos algo especial ya que ha venido a pasarlo con nosotros. ¿Cuántos años hace que no pasamos su cumpleaños juntos?
-Me da igual, tú haz con la niña lo que te de la gana, pero yo no voy a ir. Tu hija no se merece ni siquiera que la mire, me ha decepcionado mucho. - Mi padre la mira con cara de “¿Que ha pasado?” - Que te lo cuente tu niñita que a mi ni me sale de la vergüenza que me da.
-Seguro que tampoco es para tanto. Pues ya te he dicho que no vengas si no quieres, pero que yo me llevo a los tres a la ciudad. - Mi madre se da la vuelta y vuelve a la cocina. - Venga chicos, id a arreglaros. - Me voy a mi habitación.
-Hiba, ven, que te dejo yo algo. Mañana sin falta nos vamos de compras. ¿Te gusta este vestido?
-Me encanta. Es precioso – Se lo tiendo. - Toma, a ver si te queda bien porque de talla creo que es. - Se lo prueba, ¿como no le va a quedar bien con el cuerpazo que tiene?
-Me queda un pelín ancho de cintura.
-Eso se arregla rápido – Abro el cajón y le doy un cinturón. - Levanta los brazos, a ver como queda este. - Le pongo el cinturón y se lo ajusto a la cintura. - Perfecto. Si a mi me pasa lo mismo. Con esta chaqueta queda muy bien – Le doy la chaqueta, - ¿te valen manoletinas?
-Sí claro, si tacones no me suelo poner, soy alta. - Le señalo la caja de las manoletinas y me visto yo. Me pongo una blusa de manga corta con una falda alta y lisa decorada con botones delante a la altura de la tripa y me pongo otro cinturón - ¿Ves que tengo que hacer lo mismo? - Se ríe, me pongo mis tacones, que no son muy altos. Salimos al pasillo y mi padre y Raúl están esperando aunque no creo que mucho.
-Qué guapas, chicas. Yo me he peinado – Dice Raúl pasándose la mano por el pelo.
-Te has peinado, sí, en la secadora. - Se cruza de brazos y nos reímos. - Que sí, que estás muy guapo. - Me agarro a un brazo suyo e Hiba al otro, mi padre va mas adelantado, se gira.
-No os mováis – Saca su móvil y nos hace una foto. Entramos en el coche, yo delante con mi padre y los otros dos atrás, fijaos que yo a estos dos les veo juntos otra vez. Llamadme celestina si queréis pero si no se dan cuenta ellos dos solos voy a hacer yo porque se den cuenta. Yo se que ella lo ha pasado muy mal en Barcelona con el Xavier ese y con Raúl la veo feliz y me alegro por ello. Suena el tono del whatsapp de Raúl.
-Patri, es para ti, te leo literalmente: “Hazme un favor, felicita a Patri de mi parte, estoy seguro de q estas con ella. O me equivoco?” ¿Qué le digo? - Es Dani
-Gracias – Después de todo se ha acordado de mi cumpleaños. Llamadme tonta pero le echo de menos, sus tonterías y sus ideas de bombero jubilado. Esas tardes haciendo el gamba ya no están porque él no está. - Dile si quieres que sí estás conmigo aquí, en mi pueblo. - Teclea. ¿Qué contestará? - “Ya sé donde no tengo que ir” Dice. Corto ya la conversación mejor, ¿verdad? - Afirmo y se guarda el móvil.
-¿Os hace un chino?
-Claro – Decimos todos a coro. Llegamos a un restaurante que me encanta, al Big House y entramos. No solo me gusta por la comida, sino también por la decoración y el ambiente. Nos sentamos en una mesa un poco apartada de los demás y pedimos la comida. El pobre Raúl, no controla eso de los palillos en cambio Hiba los domina y yo ya tengo práctica.
-Patricia, hija, ¿por qué está tu madre así contigo?
-Se ha enterado de que no soy virgen.
-¿Qué tontería, no?
-Ya ves, pero con lo cristiana católica apostólica romana que es...Prefiero no hablar de esto. ¿Qué tal el tito?
-Bien, con sus dolores y sus cosas, como siempre. - Seguimos hablando de tonterías los cuatro. - Raúl, creo que tu sí pero Hiba lo dudo. ¿Habéis visto la ciudad? - Niegan. Salimos del restaurante y nos dirigimos al centro de la ciudad. Supongo que iremos a la parte antigua. Sí, que quiero un helado de la heladería de la plaza. Aparca el coche en el centro, encontrar aparcamiento en el centro aquí es más fácil que en otra ciudad más grande, y bajamos andando hasta la plaza.
-Me apetece un helado. ¿Alguien quiere? Yo invito

1 comentario:

  1. La madre que exagerada la viiirgen! Pobre patri lo que tiene q aguantar! :S jajaj
    PD: Pobre Dani... me está dando una penica...

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