domingo, 15 de abril de 2012

Capítulo 191


Venga Patri, se valiente y enfréntate. Piensa que no vas a tener que volver a esta casa nunca más. Bueno, tendré que venir a por mas cosas. Llamo al timbre.
-¿Quien?
-Soy Patricia, vengo a recoger cosas mías, ¿Me haces el favor de abrir?
-Sí claro. - Me abre, ¿Le digo algo? Al menos saludar, la educación sobre todo. No hace falta que te lleves bien con una persona para hablar con ella. Esta tarde voy a estar un buen rato recogiendo. Subo en el ascensor con las cajas vacías, espero bajarlas llenas.
-Hola. - No le miro, me voy a lo que fue mi habitación. ¿Qué cojo primero? Madre mía, aquí no ha entrado nadie desde que me fui. Me giro. Dani está en la puerta
-¿Qué haces aquí?
-Quiero hablar contigo.
-Ya no hay más de lo que hablar
-Si hay
-Habla, pero si es para preguntarme por lo de la discoteca no te voy a decir nada – Me quedo mirándole con los brazos en jarras.
-De eso no es.
-Pues habla entonces.
-Estamos pensando en ir en Agosto a Bilb...
-Lo sabía, me lo dijo Lara el otro día.
-Y si lo sabías ¿por qué me llamo Lara? ¿Por qué me llamó ella en vez de llamarme tú?
-Porque me dijo que ella se encargaba de avisar a todos. - Mieno
-Ah bueno... - Ufff... ha colado.
-Oye, Dani, ¿aquí no se ha entrado a limpiar desde que me fui, no? Porque como está esto de polvo...
-Pues no, para que lo iba a limpiar si yo no entro ahí?
-Por limpieza. ¿Pues por esa regla de tres en mi casa nueva solo tendría que limpiar una de las cuatro habitaciones, no? - Le digo en tono irónico.
-En tu casa limpia lo que quieras, yo ahí no me meto ya. ¿Donde esta la casa?
-¿A ti qué mas te da? No vas a ir.
-Por cierto. ¿Se puede saber que te he hecho ahora? Que el otro día tu hermano me mando un whatsapp.
-Ahora nada, las cosas vienen de atrás, lo sabes. ¿Qué te dijo? De todas formas sabes que él exagera.
-Que te hice llorar.
-Pero eso son movidas mías internas. Ahí si que no te vas a meter. Ni tú ni tampoco se debería haber metido mi hermano. No tienes motivo para que te preocupen mis sentimientos.
-Sí tengo.
-¿Ah si, cuáles? - Me dice algo casi inteligible. - No soy un perro como para oír ultrasonidos. Llámame sorda si quieres, pero no he oído lo que me has dicho.
-Dejalo, no tiene importancia – Algo dentro de mí me dice que sí tiene importancia, pero mejor lo dejo, no saquemos los trapos de los cajones.
-¿Me puedes dejar recoger las cosas tranquila?
-Vale, me voy. Si quieres algo estoy en el salón.
-Mejor, pero primero voy a hacer una cosa - Salgo de la habitación hacia el lavadero y cojo el trapo del polvo y el spray. Vuelvo a la habitación y Dani sigue en la puerta. - Yo no me vuelvo a León con esto así
-Exagerada, si ya no vas a vivir aquí.
-Lo digo por ti, a mi me da igual como tengas tu casa, pero me preocupo por ti, aunque no estés en una habitación es conveniente, que, al menos el polvo, se quite de vez en cuando. No se sabe cuando vas a tener que utilizarla. Quizá venga alguien de sopetón ¿y donde la metes, en una habitación llega de polvo? Además, el problema es que tengo aquí cosas mías.
-No haberte ido
-Haz lo que te salga de los huevos. - Le doy de malos humos el trapo y el spray, ya se me han quitado las ganas de hacerle el favor. Le empujo para que salga de la habitación y cierro la puerta con el pestillo. Oigo como tira las cosas enfadado. Me siento en la cama y noto como una lágrima comienza a correr por mi cara. ¿Por qué he tenido que venir? Tuve que haber dejado a Raúl que me lo llevara él, no tuve que haber venido. ¿Qué hago llorando? No voy a llorar por un tío, prometí, y esto no deja de ser por eso. Suena mi móvil, es un sms de Chuspi, que no puede venir a recogerme hasta la noche, que está muy liado con una reunión en la que está. Bien, perfecto, hasta la noche aquí
[…..…..…..…..…..…..DANI…..…..…..…..…..]
Estoy en el sofa, enfadado si, pero conmigo mismo. No soy capaz de decirle un puto 'te quiero'. Espero que Chuspi le haya mandado el mensaje. ¿Qué habrá dicho? Pero ahora que pienso bien, ¿para qué quiero que se quede mas rato si vamos a estar así? Suena el móvil
-Tio, ¿el mensaje?
-Enviado.
-¿Te ha contestado? - Hablo bajito, que no me oiga.
-Sí, una carita triste
-Joder Chuspi, yo quiero arreglarlo
-Si lo sé, por eso te estoy ayudando, yo también quiero que lo arregléis, eres mi amigo y quiero que no estés tan jodidamente jodido, sobre todo cuando se te está empezando a notar en el trabajo.
-No se me nota
-Sí, Dani, sí se te nota
-No
-Dani... que tú no te ves desde fuera.
-Bueno, me da igual.
-No, no te da igual, ni a mi tampoco. Mi sueldo sale de tu sueldo, y si la gente te ve desanimado no va a querer ir a verte a las actuaciones. Así que aunque solo sea por egoísmo propio me tiene que importar
-Lo que tu digas. Habla con Patri un rato o algo.
-¿Yo con ella? ¿Y qué le digo?
-Cosas para que hable conmigo o algo.
-Supuestamente ahora estoy en una reunión
-Vale...
-Hablaré con ella a la vuelta a León
-¿Tú sabes dónde esta su casa nueva?
-En Hospital
-¿En que parte de Hospital?
-No he ido, exactamente no se, supongo que siendo un chalé...
-¿En las afueras, cerca de mi casa, no?
-De la parcela de tus abuelos, en todo caso.
-Bueno sí, eso. Mi casa está en el propio pueblo. Pues ya esta, ¿hago como que voy a ver a mis abuelos y la veo, no? Es una estrategia.
-Mejor no la líes mas. Vais a iros juntos de vacaciones con los demás, ahí os vais a cansar de veros
-Pero quiero arreglarlo antes tiío.

1 comentario:

  1. Maaadre mia esto como va... :S que no se arregla!! Joee jajaja y ya estás cerca del 200! :) Que ganitas de que llegueeeee yaaaaaaaaaaaa jajajaj SIGUIENTE!!!!!!!!!!!!! Que me da mucha pena Dani... sobre todo, pero Patri también... aunq en esto se le nota mas fría... :S una pena.
    NEEEEEEEEXT!

    ResponderEliminar